martes, 20 de septiembre de 2016

EL VALOR DE LA HIPÓTESIS POSITIVA EN LA INVESTIGACIÓN




"Me gusta compararme con un montañero que, sin conocer el camino, escala lentamente y con esfuerzo. Con frecuencia debe volver sobre sus pasos porque no puede seguir avanzando. Después, por un golpe de genio o de suerte, descubre un nuevo sendero que le hace avanzar algo más; hasta que, alcanzada la cima, descubre avergonzado que existe un precioso sendero maestro por el que habría podido subir únicamente, si hubiese encontrado la justa aproximación al sendero"

Hermann Von Helmholtz

¿Es posible que exista mejor manera de definir el descubrimiento científico? Yo creo que no. En este montañero se reflejan todas las características que hemos trabajado en el texto de Marco Bersanelli:
  • Hipótesis positiva: El montañero siempre mantiene la mente abierta a nuevas soluciones al reto que tiene delante, no se rinde cuando tiene que retroceder porque no puede caminar más, sino que el hecho que tener que volver sobre sus pasos le da más fuerza para buscar el camino que lleva a la cima.
  • La identificación del error: Solo el hecho de darse cuenta de que el camino por el que vamos no es el acertado ¡YA ES UN DESCUBRIMIENTO! En algunas ocasiones el hecho de no obtener el resultado correcto nos hace decaer, nos conduce a tirar la toalla. Lo que nunca pensamos en estos instantes es que algunos errores en la teoría pueden llevarnos a un nuevo descubrimiento, como en el caso de Jocelyn Bell.
  • La alegría del descubrimiento: Según Claude Bernard, "la alegría del descubrimiento es ciertamente la más vivaz que la mente del hombre pueda experimentar". Esta alegría es similar al entusiasmo que sintió el montañero cuando llego a la cumbre de la montaña, el sentimiento de que todo el esfuerzo había servido de algo. A pesar de esta alegría, el montañero observa avergonzado que existía un precioso camino por el cual hubiera llegado a la cima sin esfuerzo. Lo mismo pasa en la investigación científica: Herman Von Helmholtz, por ejemplo, nos cuenta que en sus trabajos, no cuenta nada al lector sobre su "esfuerzo", sólo describe el camino principal por el que se puede subir a la cima de la montaña sin dificultad.
En conclusión, yo creo que la historia del montañero describe perfectamente el descubrimiento científico, a veces encontrado por casualidad o con mucho esfuerzo y dedicación.


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